La tanatofobia es el miedo irracional a la muerte.

Puede ser una respuesta natural a la exposición de la mortalidad, o puede haber sido desencadenada por algo traumático en el pasado.

Esta fobia puede manifestarse como una ansiedad intensa que dificulta el funcionamiento normal, pero es importante recordar que hay formas de tratar esta afección de forma segura y eficaz.

Cómo se define la tanatofobia.

La tanatofobia se define como un estado psicológico mórbido de miedo a la muerte.

Puede manifestarse como miedo a morir o a las cosas muertas.

El término tanatofobia fue introducido por primera vez a principios del siglo XIX por el filósofo alemán Arthur Schopenhauer en su obra maestra El mundo como voluntad y representación (1819).

La tanatofobia está estrechamente relacionada con la necrofobia (miedo a los cadáveres), pero no es idéntica.

Tipos de tanatofobia.

Se clasifica en dos subtipos:

Miedo a morir: la persona con este tipo de tanatofobia teme su propia muerte. También puede denominarse tanatofobia o morticinifobia (miedo a los cadáveres).

Miedo a los muertos: la persona con este tipo de tanatofobia teme a la propia muerte y a todo lo que le recuerde a ella, como los cementerios y los funerales.

Además, existen otros tipos:

  1. Miedo a ser enterrado vivo – alguien que sufre este tipo de fobia tiene un miedo irracional a ser enterrado sin saberlo y a despertarse en un ataúd.
  2. Miedo a los fantasmas – alguien que sufre este tipo de fobia tiene un miedo irracional a que los fantasmas existan y puedan perjudicarle personalmente. 
  3. Miedo a lo desconocido – alguien que padece este tipo de fobia tiene un miedo irracional a que haya algo malo esperándole a la vuelta de cada esquina.
  4. Pérdida de control – sentirse en el mar sin nadie que le guíe en los momentos difíciles.

¿Cuándo suele aparecer la tanatofobia?

La tanatofobia puede darse a cualquier edad, pero es más probable que se dé en personas mayores.

Tanto los hombres como las mujeres pueden padecerla, pero los hombres son más propensos a sufrirla que las mujeres.

Cuando se produce, la tanatofobia puede ser desencadenada por una serie de acontecimientos o situaciones.

Provoca una angustia extrema a quienes la padecen porque no saben cuándo va a ocurrir algo catastrófico, pero a menudo llevan una vida normal a pesar de tener estos temores durante todo el día.

La gravedad de esta condición varía entre los individuos y el tipo de miedo que tienen.

Un miedo leve podría ser ir a una funeraria o ver a una persona muerta en la vida real o en la televisión. Una fobia grave podría significar que evitan a los médicos u hospitales porque temen morir.

Pueden tener miedo en determinadas situaciones como volar o tener un accidente de coche.

Causas comunes de la tanatofobia.

El miedo a la muerte es un miedo común, pero puede ser mucho más específico e intenso en la tanatofobia.

Algunas personas tienen este miedo intenso porque han sido traumatizadas o han tenido malas experiencias con la muerte.

Otras pueden haber aprendido de la cultura que la muerte es algo que da miedo, especialmente cuando se trata de formas dolorosas de morir.

Muchas personas que experimentan tanatofobia también se preocupan por estar solas después de la muerte, y esto puede deberse a su propia personalidad o a cómo la sociedad percibe el proceso de morir y el duelo después de la muerte de alguien.

Los trastornos de ansiedad a veces también pueden provenir de la genética, o simplemente podría ser algo que sucedió cuando eras joven.

Es posible que te hayas visto involucrado en un accidente, que hayas tenido una experiencia cercana a la muerte, que hayas perdido a alguien cercano de forma repentina sin tener tiempo para cerrarlo (como cuando lo pierdes por un cáncer), o incluso que hayas visto imágenes en la televisión de personas moribundas.

También es posible que, desde la infancia, la muerte haya sido siempre un interés para algunas personas que sufren a diario enfermedades y/o dolores crónicos; tanto que se obsesionan con ella.

Conclusion

Al ser la tanatofobia  un miedo irracional a la muerte, este trastorno puede tratarse con terapia o medicación y suele tener un curso autolimitado con el tiempo.

Si quieres ayudar a alguien con tanatofobia, lo mejor que puedes hacer es ofrecerle todo el apoyo posible para que se sienta seguro y cómodo durante el tiempo que pase contigo; esto le ayudará a sentirse mejor consigo mismo y le facilitará la resolución de lo que le preocupa para que deje de tener esos malos pensamientos.